En seguida

Texto bíblico: Mateo 14:22-33

Recuerdo, perfectamente, cuando mi abuela materna en el afán de la crianza de sus nietos utilizaba mucho la frase: "En seguida". Cuando abuela pronunciaba esa frase, era para que la instrucción se siguiera al momento. De manera similar está ocurriendo en esta porción bíblica entre Jesús y sus discípulos.

En este texto, podemos identificar tres instancias en las que el escritor bíblico utiliza dicha frase para enfatizar una acción de Jesús. En primer lugar, Jesús, '"en seguida" obligó a los discípulos a subir a la barca. Aquí se intenta resaltar que esta instrucción es dada inmediatamente después de un evento milagroso, la multiplicación de los panes y los peces. El Maestro, al obligar a los discípulos a montarse en la barca, les mueve a cambiar de escenario, de realidad. Luego, al estar los discípulos en la barca y en medio de la mar, sufriendo de turbulencias y tempestades, se les aparece Jesús y, "en seguida" diciendoles: "Tened ánimo, yo soy, no temáis". Es decir, los momentos de dificultad siempre estarán presentes, pero las palabras de nuestro Señor retumbarán en nuestros oídos y nos recordarán que Él está con nosotros. Finalmente, Pedro, quien deseaba imitar al Señor, y después de ser autorizado por Él también caminó sobre las aguas. Es el mismo que con el fuerte viento perdió de perspectiva en quien debía tener puesta la mirada y, al ver que estaba hundiéndose, pide a Jesús que le salve. Es en esa última escena donde el Hijo de Dios, "en seguida o al momento", extendió su mano para salvarle y calmó la tempestad.

Si pensáramos por un momento acerca de una situación tempestuosa por la que estamos atravesando y en la que no vemos luz al final del camino, te recuerdo mi hermano y mi hermana, que la voz de Dios retumbará, tal y como ocurrió con los discípulos, "en seguida" y nos dirá: "Tened ánimo, yo soy, no temáis". Que así nos ayude Él. Amén.