Confesando nuestra fe histórica

¿Cuál es la sexta petición?
"Y no nos dejes caer en tentación, más líbranos del mal". Esto es puesto que somos tan débiles que no podemos resistir por nosotros mismos ni siquiera por un momento, y además, ya que nuestros enemigos jurados, el diablo, el mundo, y nuestro propio pecado, sin cesar nos asaltan, agrádate preservarnos y fortalecernos para que podamos resistir firmes contra ellos, y no ser derrotados en este combate espiritual, hasta que al fin obtengamos la victoria completa".
 El Catecismo de Heidelberg, 4.127