lunes, 26 de mayo de 2014

Confesando nuestra fe histórica

"Dios instruye a su iglesia y la habilita para su misión por medio de la predicación y la enseñanza. Cuando éstas se practican con fidelidad a las Escrituras y en dependencia del Espíritu Santo, el pueblo oye la palabra de Dios y acepta y sigue a Cristo. El mensaje se dirige a personas en situaciones particulares. Por lo tanto, la predicación, la enseñanza y el testimonio personal eficaces, requieren de un estudio disciplinado tanto de la Biblia como del mundo contemporáneo. Todos los actos de, culto público deben ser conducentes a que los seres humanos escuchen el evangelio en un tiempo y lugar particulares, y a que respondan con la obediencia correspondiente."
La Confesión de 1967, 9.49