Este es el resumen del sermón ofrecido por nuestro Pastor, el Rvdo. Adolfo Santana Cordero, el domingo, 27 de septiembre de 2015.
Texto bíblico: Marcos 9:38-41
Hace tres años, para esta misma fecha, tuve la oportunidad de predicar en la Primera Iglesia Presbiteriana en Bayamón sobre este mismo pasaje bíblico, al momento de mi salida par venir a servir entre ustedes. En aquella oportunidad, resalté del texto la afirmación de Jesús, "el que no está contra nosotros, por nosotros es" (v. 40). Esas palabras debieron provocar en los discípulos del Señor, el reenfoque necesario sobre la labor que recién estaban realizando y, además, que pudieran comprender que Dios escoge a quien quiere, como quiere y donde quiere para que sirva en su nombre (v. 39).
Sin embargo, hoy, el leccionario común hace que nos reencontremos con esta enseñanza de Jesús, el Maestro. En esta ocasión, quiero que se preste atención a la forma en la que Juan responde a Jesús: "Maestro, hemos visto a uno que en tu nombre echaba fuera demonios, pero él no nos sigue; y se lo prohibimos, porque no nos seguía" (v. 38). Interesantemente, es el mismo Jesús el que previamente les había dicho a sus discípulos como serían las cosas: "Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres"(Mc. 1:17). Además, los discípulos estaban conscientes de las responsabilidades conferidas por Jesús (cf. "Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios" (Mc. 3:14-15). Por lo tanto, no nos debe parecer raro, el ver líderes que utilizan posiciones de autoridad y de poder para sus propósitos, reconocimientos y escuchar que digan: "yo sigo a fulano o a mengano". Ese era el problema que tenía Juan, por lo que no comprendía por qué otro daba testimonio de Jesús, sino era de los doce.
¡Bendito sea Dios por esta maravillosa enseñanza! ¡Qué bueno que hemos respondido al llamado de seguir a Cristo! ¡Ayúdanos, Dios, a nunca distraer nuestra mirada! Amén.